Camagüey- Entre aplausos, música y el café de “La Comarca”, concluyó la edición 31 de la muestra audiovisual “El Almacén de la Imagen”, convocada por la filial agramontina de la Asociación Hermanos Saíz (AHS).

En la gala de clausura del evento, varias instituciones concedieron premios colaterales, en esta ocasión, acaparados por realizadores procedentes de La Habana y Camagüey, además, se entregaron galardones por cada especialidad y género audiovisual, al igual que los de animación y ficción.

El Gran Premio “Luces de la Ciudad” se le otorgó al audiovisual “A Camagüey, mi globo rojo”, que trascendió como el más laureado de la velada, al ganar los reconocimientos a mejor mini-corto, destacar en las especialidades de Dirección y Música original y merecer colaterales de parte de la UNEAC y la Universidad de las Artes.

“Nos sentimos muy felices y agradecidos con todos estos reconocimientos en tantas categorías que hemos obtenido en esta edición del Almacén de la Imagen. Estamos sorprendidos, sobre todo, porque no esperábamos que A Camagüey, mi globo rojo tuviera tanta connotación. Personalmente estoy muy agradecida con mi equipo de trabajo: Mayra, la asesora; Víctor, el camarógrafo y Mailen; la editora”, comentó Marianne Portuondo, la joven directora del multipremiado audiovisual.

“Esta edición era muy esperada por muchos, pues después de tanto tiempo de confinamiento por la situación de la COVID-19, pudimos hacer un evento presencial y online. En esta ocasión recibimos un gran número de obras de nueve provincias y tuvimos un jurado de lujo”, expresó Alberto Santos, presidente del comité organizador de la muestra.

“Las obras presentadas tienen mucha calidad, reflejan mucha diversidad, no solo en cuanto a temas, sino también en estética. Este año, una vez más, confirma cuánto preocupa a los jóvenes realizadores y el interés por mostrar la realidad y la actualidad de nuestro país. Varias obras hacían referencia a la situación de la COVID-19, tal es el caso de la merecedora del Gran Premio”, refirió Yasel Toledo, vicepresidente nacional de la Asociación Hermanos Saíz.

Un intenso trabajo en las redes sociales, conferencias, conversatorios, muestras de disímiles materiales, intercambios y homenajes, caracterizaron la entrega 31 de uno de los eventos más importantes de la AHS, que aunque ya cerró sus puertas, deja a su paso los sueños y esperanzas de una próxima cita que llene de luz joven a la imagen.

“Estamos muy satisfechos por todo lo que pudimos hacer. Después de soñar tanto el Almacén, logramos concretarlo y nos sentimos felices por eso. Ahora nos toca tomar un descanso y comenzar a pensar en la próxima edición para que se vuelva a llenar la ciudad de imágenes y sonidos creados por jóvenes cubanos”, prosiguióAlberto Santos.

“Aspiramos a que el Almacén de la Imagen siga creciendo y llegue a más personas. También deseamos que esta ciudad se convierta en la capital del audiovisual joven en nuestro país, aprovechando este evento y otros que hay aquí, así como la pasión que predomina en este lugar. El hecho de que el Almacén se desarrolle en una ciudad como esta, en la que se respira tanto arte y cultura, es muy favorable”, concluyó Yasel Toledo.

Texto y Foto: Mónika de los Angeles Escobedo Artola