Portal Cultural de Camagüey

jueves, abril 25, 2024

Patricio Ballagas: un símbolo de la cultura de Camagüey

Quiso el destino con sus ironías que el tema musical “Te vi como las flores”, compuesto por el trovador camagüeyano Patricio Ballagas Palacio, fuera estrenado el día en el que cerraba los ojos para siempre, el 15 de febrero de 1920. A partir de entonces, esa canción fue rebautizada con el nombre de “Adiós a la vida”.

Ballagas partió hacia la capital cubana cuatro años antes de fallecer, bajo el único pretexto de mejorar su suerte en el mundo de la canción. Pero murió y lamentablemente no fue reconocido como merecía, no obstante su fuerza creativa que lo situó a la altura de otros grandes de la época como Sindo Garay y Manuel Corona.

El creador de la canción “La timidez”, su número más famoso, nunca dejó de ser un hombre sensible, dedicado a la música; mas sentía inclinación por la carpintería, oficio totalmente opuesto por su rudeza, aunque similar por la ternura que debía grabarle.

Cuando la Patria necesitó de sus manos para empuñar un machete, y no para tocar las cuerdas, demostró su lealtad y se incorporó a la guerra independentista de 1895.

Este hombre, de raza negra y procedente de una familia pobre, fue el padre del llamado contrapunto, aportándole a sus composiciones y a la voz segunda, singularidad armónica y melodía.

Patricio no escapó a la vida bohemia de los principios del siglo XX, y frecuentó parques y bares cantándole al amor y a la vida.

Dejaba fluir su instinto artístico cuando creaba la música o la letra de una canción, y le imprimía originalidad y ritmo al utilizar el compás de 4X4, técnica que era desconocida por muchos autores de la época.

Para él no era complicado dominar el contrabajo, el cornetín, el trombón, la flauta y la guitarra. Su repertorio abarcaba desde lo culto hasta lo popular y disfrutaba las descargas con los amigos, especialmente en las tardes dominicales.

Aunque el talento del joven camagüeyano marcó pautas dentro de los pentagramas de la trova cubana, el paso del tiempo ha borrado muchas de sus creaciones, pues fue la oralidad el principal soporte en que se inscribieron.

Este 15 de febrero, como sucede cada año, los trovadores agramontinos recuerdan entre guitarras y acordes a Patricio Ballagas, uno de los grandes dentro de la historia musical cubana.

Por Juan G. Mendoza Medina/Radio Cadena Agramonte

Imagen de Archivo